Capitulo 43

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Esperaba que en cualquier momento me reprochara que le hubiera ocultado algo como eso, que se enojara y me dijera unas tantas cosas. Pero no reacciono así, y eso no era bueno… no me esperaba la forma en que se estaba poniendo.

Se quedo inmóvil un momento para luego sentarse y quedarse de igual manera, no me gusto la forma en que estaba, su rostro denotaba tristeza, incluso sus ojos estaban un poco vidriosos, unas lágrimas amenazaban con salir. Me dio miedo lo que estaba viendo, eso era por culpa mía…

Ana: Cami…-la llame pero no obtuve respuesta- no sabía que el significara tanto para ti… Valeria: Camila que te sucede estás bien?-pregunto preocupada
Ana: no te preocupes, como dije no es nada serio
Camila: no es eso…-dijo suavemente- tu sabes como soy, y hoy estoy más sensible de lo normal-trato de sonreír
Ana: si lo sé…-sonreí- pero no quiero que te pongas mal por esto… porque si es así, yo no…
Camila: que no… lo que pasa es que… se que va a sonar muy tonto, pero yo los quiero a los cuatro, a Bill, Tom, Gustav y a Georg, aunque hasta el día de hoy nos hayamos conocido…
Ana: Camila…
Camila: yo me alegro por ustedes- le mire sorprendida eso si que no me lo esperaba- ¿que? no soy una fan loca…no mucho, amo su música y a ellos les tengo un cariño especial, pero de ahí a meterme en sus vidas es otra cosa. Tú eres una de mis mejores amigas y Bill, bueno ya sabes lo que significa para mí, y si dos de las personas que más quiero en este mundo están felices juntos pues yo también, es solo que ahora… Bill ya no va a ser solo nuestro…
Ana: eh?
Camila: hablo de que ya no solo es solo de las fans ahora lo vamos a tener que compartir…
Ana: bueno es que tampoco es así-me reí- entre nosotros no hay nada formal…

Y así pasamos la siguiente hora, contándole todo de principio a fin, de cómo los habíamos conocido, Valeria se encargo de contarle los detalles que yo quería omitir, y gracias a ello Camila me regaño varias veces por como había tratado a Bill al principio. Nos pregunto como era cada uno de los cuatro, ella quería saber si eran como los había visto en entrevistas, y efectivamente no había mucha diferencia, después hablamos de lo que habían sido nuestras vidas el último año, tocamos cosas tristes, las tres habíamos pasado por cosas muy desagradables, pero en esos casos Camila sabía como hacernos reír, teníamos aun muchas cosas que contarnos pero mañana sería un nuevo día, ella se fue a su casa y nosotras subimos a nuestras habitaciones.

Me alegraba tener un momento para mi sola alejada de todo el bullicio, quería asomarme por el balcón para ver si las fans seguían ahí pero si me veían y si por alguna razón se daban cuenta de a quien pertenecía la habitación estaríamos en graves problemas… tome la maleta y busque ropa más cómoda, saque un pantalón oscuro y una fina blusa de tirantes color blanca, con encaje en la parte de arriba, había que estar preparada para cualquier situación… me metí al baño, me cambie, me cepille el cabello, y termine por quitarme el maquillaje también y Bill todavía no aparecía, aunque pensaba que ya cuando estuviéramos solo los dos seríamos presa de los nervios como nos había sucedido antes y sabiendo que Bill era un chico tímido tendría que ser yo la que tomara la iniciativa… me asombraba yo misma de las ideas que revoloteaban en mi cabeza, decidí mejor dejar de pensar en ello, las cosas fluirían por si solas o no?

Mi idea desde principio era esperarlo, pero nada más me tire en cama y de inmediato me quede dormida.

Abrí los ojos con pereza, la luz del día me calo de inmediato lo que me hizo cerrarlos de nuevo, me di un par de vueltas en mi lugar, la conciencia de donde estaba y con 'quien', me hizo dar un salto en la cama para quedar sentada. Mire a mi lado pero Bill no estaba ahí.

Ana: Bill- le llame esa y dos veces más. Fue entonces que me di cuenta que no estaba -aaaaggh-gruñi-donde se había metido!!?

Debí haber estado muy agotada el día anterior porque ahora que prestaba atención a la suite era como si la viera por primera vez. Inspeccione cada detalle, fue entonces que mire el reloj eran las 12, tanto había dormido? me deje caer en la cama de nuevo, luego de unos minutos de esperar… me levante, fue entonces que vi una pequeña nota en la mesita de al lado, que decía:

Ana:

Una entrevista surgió de último momento. No te lo dije antes porque anoche llegue muy tarde y por la mañana seguías durmiendo y no quise despertarte. No sé a que hora regresaremos…pero tratare de que sea lo antes posible. Pide lo que quieras.

Bill

Qué paso con eso del día completo para nosotros!!? No me lo creo. Pero a que vine yo a Alemania entonces!!? Claro una era por Camila pero también por… ahh… Y que mono él, queriéndolo arreglar con eso de ‘pide lo que quieras’. Es que era el colmo!! Ayer que llegamos me lo hubiera dicho, y no hubiera prometido nada, no creo que las entrevistas se las programaran a última hora así que ya lo tenía que haber sabido!!!

Me pare aun de mal humor y camine descalza, me acerque a donde estaba mi maleta y saque algo de ropa que me lleve al baño, abrí las llaves de la bañera, mientras se llenaba salí cuidadosamente para contemplar la vista desde el balcón, que sencillamente era esplendida, frente a mis ojos la ciudad se presumía majestuosa.

Me metí a la bañera, una agradable sensación me recorrió el cuerpo. No entendía como pude quedarme dormida ayer, es que… fue una gran oportunidad que deje escapar… tenía la suerte de compartir la habitación con Bill y lo mejor que se me había ocurrido hacer era dormir… es que no podía ser más estúpida!- me sumergí por completo en la bañera aguantando la respiración- luego de unos segundos volví a mi posición original recuperando el aliento.

A quien engaño solo me quedaba una noche y un día más en Alemania, nada iba a pasar- resople- mejor me resignaba ahora y así dejaba de estresarme.

Salí de la bañera ya más tranquila, me seque con una toalla gigantesca y afelpada. Tome mi tiempo para vestirme y secar mi cabello, total ya no tenía ninguna prisa por nada, no tenía otra que ir preparándome para el cumpleaños de Camila, pedí el desayuno, que en menos de 10 minutos subieron, estaba despidiendo al mozo cuando Valeria llego. Me miro y luego miro dentro de la habitación.

Valeria: y Bill?
Ana: no sé y la verdad no me interesa
Valeria: no me digas…se pelearon?-puso las manos en la cintura
Ana: lo hubiera preferido
Valeria: no te entiendo
Ana: que ayer cuando lo viste tu en el lobby también fue la última vez que lo vi yo
Valeria: ¿como? No durmió aquí?-pregunto sorprendida
Ana: Si, pero ayer me quede dormida y hoy que he despertado ya no estaba
Valeria: ah bueno… yo había pensado que había ocurrido otra cosa…
Ana: no, no ocurrió nada ni va a pasar nada- ella me miro extrañada
Ana: nada, olvídalo-la invite a pasar- Ya que estás aquí desayunamos
Valeria: desayuno a estas horas? Bueno te acompaño pero yo ya desayune
Ana: si?
Valeria: si, con Camila
Ana: y donde está?
Valeria: ya se fue, nada más estuvo media hora
Ana: y por qué no me despertaron? yo que la quería felicitar...
Valeria: bueno pensamos que estarías ocupada… ya sabes…
Ana: pues ya vez que no… lo único que he hecho es dormir como tronco. Entonces no has visto a nadie?
Valeria: no. Supongo que salieron temprano…

Dimos una vuelta por el hotel, en vista de que no teníamos la mínima idea de en donde se habían metido aquellos, extendimos la vuelta fuera del hotel, recorrimos las calles, admirando los edificios y el paisaje, me gustaba mucho, podía vivir ahí, aunque tanto frío tampoco era de mi agrado, entramos a un local donde vendían varios tipos de accesorios, entre ellos pulseras, guantes, gorritos, bufandas, etc. Valeria iba a comprarse unos guantes pero los que estaban ahí eran de color crema, así que se acerco al dependiente de la tienda al que intento preguntarle si tenía en otro color pero ni nosotras hablábamos alemán y el no hablaba inglés y mucho menos español, así que se empezaron hablar a señas, minutos después otro empleado salio con un par de guantes azules. Cuando algo se quiere no importan las barreras que haya ni siquiera la del idioma xD

Nos dirigimos al hotel cuando Valeria recibió una llamada de Tom. Por lo que me dijo parecía que se habían preocupado bastante por nosotras porque no sabían donde estábamos y más porque según le dijo Tom, Bill me había estado llamando. Encendí el celular y afectivamente vi que tenía como 8 llamadas perdidas, ahora si se acordaba de mi!?

Todos estaban en recepción. Tom y Georg estaban jugando luchitas o algo parecido, mientras Gustav y Andreas hablaban, nada más entrar sentí una mirada penetrante, fue entonces que vi a Bill un poco más atrás hablando con David. Tom fue el segundo en vernos y fue quien se acerco primero.

Tom: ¿donde se habían metido? No saben lo que nos llegamos a imaginar, Bill estaba de los nervios, imagínense como nos tenía…
Valeria: pues si ni que fuéramos unas niñas, y nada más fuimos a dar una vuelta, no nos íbamos a quedar todo el día en el hotel, y encima de que ustedes ni nos avisaron que salían…
Ana: Bill es un exagerado y un extremista!-dije sin pensármelo dos veces a lo que tanto Valeria como Tom me miraron extrañados, pero luego los labios de Tom se curvaron en una sonrisilla traviesa
Tom: es lo que yo le digo todo el tiempo… que tiene que relajarse
Georg: a quien quieres engañar, si tu eras quien estaba más nervioso
Gustav: eso es cierto
Tom: yo!? Yo no…
Andreas: si yo te vi- nos miro- era el que tenía más prisa por terminar la entrevista y le decía a Bill: ‘Bill llámalas de nuevo’, ‘vamos a buscarlas’ ‘tenemos que terminar con la entrevista de una buena vez’-nos explico
Tom: si quería terminar con la entrevista pero por otras razones…
Georg: lo dijo como unas mil veces-dijo burlándose
Gustav: si, que en todo el rato que estuvimos ahí no paro
Ana: ah! o sea que Tom era el único que se preocupaba por nosotras y a ustedes no?
Gustav: no, no es eso..-miro a Georg buscando apoyo

Tom estaba más aliviado de que la atención se hubiera desviado a Georg y Gustav que ahora lucían como si estuvieran en aprietos.

Ana: tranqui que no pasa nada
Valeria: ya deberían de conocer a Anita jaja

Andreas: bueno y si vamos a comer algo?
Ana: si!-acepte encantada, no porque tuviera hambre sino porque quería conocer otra cosa de Alemania y no solo el hotel-a donde vamos?
Georg: a ningún lado
Ana: eh?- murmure pensando que era otra broma. Tom fue el único que dijo algo al notar mi cara de decepción
Tom: es que no podemos salir, hicimos todo un numerito para ir a la entrevista y seguramente haremos otro cuando vayamos a casa de tu amiga, así que vamos a tener que comer aquí
Ana: ya veo-dije resignada

Pasamos por donde estaban Bill y David pero la verdad es que ni siquiera los mire. Nada más entrar al restaurante se nos acerco un mesero de lo más amable a ofrecernos una mesa, supuse que eso era por ellos, nos dieron una mesa lo más alejada de los demás aun así era en una zona amplia y bien iluminada, donde ellos podían estar a gusto alejados de las miradas curiosas.

En el buffet había una gran variedad de comida. Cada quien tomo un plato y fue por lo que le apetecía. Todos servimos pocas cosas a excepción de Gustav y Andreas, sus platos estaban a reventar, Georg se excuso diciendo que tenía que mantener la forma. Ya todos estaban en la mesa, ya iba a llegar cuando me detuve porque sentí que unos dedos tocaron mi espalda.

Bill estaba parado detrás de mi, con una sonrisa que me hacía derretirme, así que desvié un poco la vista.

Bill: ¿qué pasa? ¿Sucede algo?
Ana: no, nada, por qué?
Bill: Vi cuando llegaron-hizo una pausa como esperando que dijera algo pero como no lo hizo continuo- ni siquiera me saludaste…
Ana: pues ya estamos a mano-me aleje haciendo que quitara su mano, el me miro extrañado- tu no te dignaste ni a decir que te ibas
Bill: ah… -sonrió- es eso, pero te dejo una nota, no la leíste?
Ana: si, por eso lo digo. En vez de dejarme una nota me lo hubieras dicho
Bill: pero estabas dormida-dijo algo irritado- y si te hubiera despertado apuesto a que te hubieras enojado
Ana: no es verdad, pues lo sabrías si lo hubieras hecho.
Bill: bueno pues a la otra lo haré.
Ana: es que no va haber otra…

Le mire seria, no quería que hubiera sonado de esa manera pero creo que así fue como lo entendió, aunque fue lo bastante inteligente como para no ahondar en ello.

Bill: ok, ya veo que prefieres que te hablen de frente igual que yo, eso me gusta. Anda vamos con los demás. No vas a estar enojada el resto del día no?
Ana: que no lo estoy.
Bill: bueno para estar más seguros…-dijo mostrando una sonrisa traviesa

Se acerco aun más, puso sus manos en mi cintura, que acaso iba hacer lo que estaba pensando!?? No se atrevería…!

Mire alrededor para acerciorarme que no hubiera nadie que nos estuviera viendo, me preocupaba que hubiera por ahí algún fotógrafo. Sentí los dedos de Bill haciendo presión en mi estomago captando de nuevo mi atención. Sonrió malicioso, empezó a hacerme cosquillas.

Ana: n…no…suéltame-decía entre risas- esto es trampa, así no se vale!!
Bill: quien dice que no…

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