Capitulo 54

En el vuelo de regreso me toco como compañera una agradable señora de alrededor de unos 50 años, que antes de partir expreso que sentía siempre mucho nerviosimo al subir a un avión y que la única forma en que lo hacía era por un motivo de fuerza mayor y en este caso eran sus nietos.

Entrelazaba los dedos frecuentemente y pasaba saliva con dificultad, le pregunte por sus nietos, sus nombres, sus edades, entonces comenzó a contarme la historia completa, diciendo un montón de veces lo orgullosa que estaba de ellos y de su hija, que era madre soltera, ni cuenta se dio cuando el avión despego, momentos después se rindió ante el cansancio y se quedo dormida.

Ella me hacía recordar a mi madre, la extrañaba mucho y a mi padre también. Era tiempo de llamarlos.

Recogí la maleta, busque con la mirada a Valeria, esta vez si la había llamado, me aseguro que estaría puntualmente y no lo dudaba, por eso fue que me desconcertó verlo a el. Titubee antes de acercarme por completo, el también camino con cautela, sonrió débilmente.


Alex: No soy la persona que esperabas.

Ana: no, en realidad…

Alex: espero que no te moleste que haya venido…

Ana: molestarme no, pero me sorprende un poco, creí que vendría…

Alex: lo sé… es solo que insistí en venir

Durante el camino me explico a grandes rasgos que tanto el como Dean habían ido a ver a Valeria, que quiso dejarles solos un momento y se ofreció a venir por mi.

Alex: así que…-dudo- …fuiste a ver a Bill?

Ana: si

Alex: eso quiere decir que lo de ustedes es enserio?

Ana: eso creo…

Después… silencio… mantuvo su vista al frente, en el semáforo, había comenzado a llover, algunos corrían para resguardarse y otros simplemente disfrutaban de la lluvia.

Ana: sé lo que piensas

Me miro unos momentos antes de contestar

Alex: No he cambiado mi opinión respecto a el… no te lo voy a negar… pero tampoco voy a meterme en tu vida… yo… lo respeto por la amistad que tenemos

Ana: bien… gracias... eso me basta

Ni Valeria ni Dean se dieron cuenta cuando llegamos, ambos estaban sentados en el sofá frente al televisor. Ella tenía la cabeza apoyada en su pecho y el la abrazaba.

Ana: ¿que película vamos a ver?

Los dos se giraron. Valeria se puso de pie y me abrazo como si hubiera pasado mucho tiempo sin vernos, luego Dean se levanto y se acerco a saludarme.

Ana: Ya con razón, quería que me fuera mientras este se el quedaba aquí, no?-le dije a Valeria en voz baja, cuando Alex y Dean regresaron al sofá
Valeria: no… solo que… ¿y que tal? ¿Como es Francia?
Ana: buena forma de cambiar el tema
Valeria: primero contéstame
Ana: No primero contéstame tú… - ella arrugo la frente en señal de preocupación, lo que quería decir que se estaba estresando- pues mira… en verdad que no se muy bien… de lo que si se… es de habitaciones de hotel… - le sonreí
Valeria: ya me imaginaba algo así- se rió
Ana: entonces Dean se quedo el fin de semana aquí, verdad?
Valeria: si… Es que hay algo que no te he contado…
Ana: ¿qué cosa?
Valeria: es que Dean y yo formalizamos nuestra relación…
Ana: ¿¡qué!?- eleve la voz sin darme cuenta y los dos en el sofá se me quedaron viendo raro

Tome de la mano a Valeria y la lleve a la cocina, me esperaba que me dijera cualquier cosa pero no esto.

Ana: haber ahora si dime…

Valeria: jaja mm… -pues nada que…-se puso roja- llevábamos dos semanas hablando de esto…y ayer me pidió que intentáramos algo serio y… le dije que si…

Ana: ¡no! es que no me lo creo- era difícil creerlo, a Valeria solo le había conocido a un novio formal con el que duro más de tres años de noviazgo y al que le costo mucho olvidar y después puros ligues, lo que me daba a entender que realmente estaba enamorada de Dean- llevas dos semanas pensando si decirle a Dean que si y hasta ahora me lo dices…-le reclame

Valeria: emm… si-se rió- además tú casi siempre has estado con Bill…

Ana: ¿¡y eso qué!? Además, no es cierto…- la mire seria unos momentos, luego me acerque y la abrace- pues… Felicidades!!

Valeria: jaja gracias


El resto de la tarde nos tiramos los cuatro en los sofás a ver una película tras otra. Alex salio en dos ocasiones primero a comprar un par de cervezas para el y para Dean y luego a comprar cigarrillos, finalmente se fueron los dos bastante entrada la noche.


...

Faltaban pocas horas para el año nuevo. Agradecía que terminara, era la primera vez que lo celebraría lejos de casa, sin mis padres, no podía evitar ponerme triste a ratos, pero afortunadamente no había tenido mucho tiempo como para pensar en ello, el único día libre que habíamos tenido había sido el 25, el resto los habíamos pasado trabajando al igual que el día de hoy.

Valeria se había ido antes a casa ya que le había dicho que tardaría un par de horas más por unos encargos extras que me había hecho Lorena, cosa que no era cierto, afuera estaba Dean esperándome.

Dean: ¿listo?

Ana: si, vamonos ya.

Se suponía que mientras tanto Valeria a estas horas empezaría a preparar la comida con la ayuda de Lorena, tanto ella como su novio pasarían el año nuevo con nosotras, al igual que Dean, Alex y una amiga suya.

Antes de pasar a recoger el pastel, que se suponía tendrían listo a las siete treinta en punto, fuimos a comparar botanas, globos, espuma, y de más cosas que ocuparíamos.

Dean bajo del auto tardo alrededor de unos quince minutos, luego regreso con una caja bastante grande. Pasaban de las ocho, Dean aparco el auto en el estacionamiento del edificio.

Dean: ¿crees que este ahí?

Ana: si todo sale como lo planeamos no debe estar…

Dean: ahora si ábrelo- Me paso una pequeña caja, batalle un poco en abrirla- ¿qué te parece? ¿Te gusta?

Ana: vaya…-me quede embobada observando el collar, era una cadena finita con un precioso rubí azul- es hermoso Dean, tienes muy buen gusto.

Dean: gracias.

Ana: Voy a llamar a casa… -Marque el número del apartamento, sonó seis veces y nada- no creo que este, demonos prisa.

La comida estaba en el horno, faltaba mucho para que la carne se cociera por completo, coloque un mantel nuevo en la mesa, Dean iba colocando los platos y las servilletas.

Ana: yo termino de poner los cubiertos tu ponte a inflar globos

Dean: ok

Ana: haber…son siete lugares, Valeria, Dean, Lorena, su novio, Alex y su amiga… -repase mentalmente- ¿Dónde esta Alex? Debería haber llegado ya…

Dean: no lo sé, ya debería estar aquí-miro su reloj- siempre llega a la hora de la borrachera…

Ana: No me digas eso… oye… no puede ser… sabes que…-los dos nos miramos al mismo tiempo

Dean: olvidamos comprar el vino-completo lo que iba a decir

Ana: A Alex le va a dar un ataque, ¿¡como se nos pudo olvidar!? Bueno haber… que más falta… -mire a Dean, apenas había inflado cuatro globos y el aire ya se le estaba acabando- hay que dejar el cigarro…

Dean: eso creo-tosió

Ana: haber pásame uno- estaba a punto de empezar a inflar el globo cuando alguien toco la puerta.

Dean: es Valeria?

Ana: no lo creo… es que… todavía no debería llegar…

Abrí la puerta pero no por completo me tranquilice al ver a Alex.

Ana: que bueno que llegaste… -abrí la puerta por completo- ya era hora… -sonrió- nos hace falta tu ayuda… adivina que olvidamos comprar… -me quede callada.

No me había dado cuenta que detrás de el había una chica, debía ser su amiga, Alex se hizo a un lado, entonces la vi, era ella, solo que el color de su cabello era diferente, ahora era castaño oscuro, no me explicaba que hacía con ella aquí.


Kim: hola-sonrió

Ana: hola

Kim: se que no me esperabas, perdona por venir así…

Ana: ah… no, solo es un poco… pasen-me hice a un lado para que los dos entraran. Ella camino hasta llegar con Dean.

Alex: te molesta que la haya traído?

Ana: eh? No. No me esperaba que ella era la amiga que ibas a traer, es más, ni siquiera pensé que seguías teniendo contacto con ella…

Alex: ya…

Alex se fue a comprar el vino, mientras tanto Kim empezó a ayudarle al pobre de Dean, sus pulmones no daban para más, mientras tanto fui a la cocina, intentando sacar el pastel de la caja. Levante el pastel pero la caja se había quedado pegada, al plato.

Kim: déjame ayudarte- ella cogio la caja mientras yo ponía el pastel en la mesa
Ana: ah… gracias
Kim: de nada. ¿En que más puedo ayudarte?
Ana: ehm… creo que por ahora todo esta bien.
Kim: te pido disculpas de nuevo... por venir así como así…
Ana: ¿eh? ¿Qué? No, no lo hagas, eres amiga de Alex por lo tanto eres bienvenida aquí
Kim: gracias.

Abrí el horno para revisar la comida, escuche como Kim movía una silla, cuando la mire estaba sentada, observando a su alrededor.

Kim: ¿y como esta Bill? -Ya se me hacía que había tardado demasiado en preguntar.

Ana: bien, bien, creo.

Kim: dentro de dos semanas voy a ir a Alemania quizá lo vea…

Ana: no lo creo-me miro extrañada- es que para esas fechas no van a estar ahí, ya tienen varios compromisos…

Kim: ah… ya… que lastima… tenía muchas ganas de verlos… bueno ya será para otra… sonrió

Ana: si.


Dean: ya vienen-anuncio y salio de la cocina

Kim y yo también nos fuimos al recibidor, la primera en entrar fue Lorena quien nos echo un vistazo rápido, seguido de ella entro Valeria, entonces todos gritamos al unísono:

-¡Felicidades!

Alex le echo un montón de espuma, no solo le toco a ella sino también al novio de Lorena que venía detrás de ella.
Valeria: ¿qué es esto?-dijo mientras intentaba quitarse la espuma de la boca- Jaja
Alex: feliz cumpleaños!-la abrazo- cuantos celebramos eh?
Valeria: gracias, ahm… eso no se pregunta… jaja 23
Alex: tan pocos? Todavía eres una niña- Valeria le dio un beso en la mejilla.

La fuimos felicitando uno por uno, miro a Kim de reojo, note que se sorprendió pero supo disimularlo muy bien, Kim la abrazo y le entrego un pequeño presente.

Alex: muero de hambre

Ana: pasemos a la mesa

Valeria: voy a ver la comida

Lorena: No, no, no tú siéntate

Ana: nosotras nos encargamos de servir la comida

La cena transcurrió de forma tranquila, fue bastante agradable. Por un momento Dean y Valeria se alejaron, ambos salieron al balcón, supuse que le daría su regalo de cumpleaños. Faltaban escasos minutos para despedir el año.

Llene las copas, uno a uno tomaron sus copas y salieron al balcón. Solo faltaba llevar las copas de Dean y Valeria.

Ana: Kim-le grite- podrías…?-mire las copas

Kim: claro

Era una noche bastante fría, no había gente en la calle, pero se notaba el barullo en varios restaurantes cercanos.
5, 4, 3, 2, 1¡Feliz Año Nuevo! Chocamos nuestras copas, nos abrazamos unos a otros mientras observabamos los fuegos artificiales.